21 Noviembre 2022

La gestión eficaz del capital circulante es un objetivo fundamental para las empresas

Alejandra Alcalde, Head of Supply Chain Finance Global Sales

En el entorno económico global, la financiación de las cadenas de suministro ha sido objeto de atención por parte de las empresas desde hace más de 30 años como medio para gestionar de forma más eficiente su base de proveedores.

Si bien esa financiación tiene múltiples posibilidades, la gestión de los pagos a través de los programas de ‘confirming’, también llamado ‘reverse factoring’ o ‘Supply Chain Finance’, tiene ventajas evidentes para todas las partes ofreciendo al mismo tiempo automatización, simplicidad, globalidad, mejora de ratios financieros y refuerzo de las relaciones comerciales estratégicas con los proveedores.

¿Cómo puede ayudar el Supply Chain Finance a las empresas a gestionar sus cadenas de suministro en un entorno de incertidumbre económica?

La disrupción económica que se vivió a nivel mundial durante la pandemia de Covid-19, o los efectos de la reciente guerra de Ucrania, han generado grandes tensiones y desafíos a las cadenas de suministro de las empresas. En momentos como esos se pone de manifiesto la necesidad urgente de apoyar a la base de proveedores a través de soluciones y/o programas específicos que permitan minimizar el impacto de una caída acusada de la producción.

Un buen ejemplo es el ‘Supplier Development Program’ que anunció el grupo italiano Enel en julio de 2020. El objetivo de este programa es apoyar a su cadena de suministro mediante una oferta de servicios financieros que contribuyen a los objetivos estratégicos de la compañía y que, al mismo tiempo, promueven el desarrollo sostenible.

La gestión eficiente del capital circulante es un objetivo crítico para las compañías. En momentos de crisis es habitual que se retrasen los cobros y se alarguen los plazos de pago a los proveedores tal y como analiza PwC en su ‘Working Capital Study 21/22’. En este marco, las compañías vuelven a poner el foco en la liquidez mientras demandan soluciones que les aseguren la gestión de sus pagos y cobros a nivel global. Tal como hemos podido comprobar, clientes que hasta un momento dado no han considerado el ‘Supply Chain Finance’, optan por desarrollar este producto como herramienta para mejorar su Net Working Capital.

¿Es la sostenibilidad una palanca de crecimiento de los programas de Supply Chain Finance?

Sin duda. Los programas de Supply Chain Finance pueden ayudar a alinear a los proveedores con dichas prioridades estratégicas. Empresas como Endesa o Nestlé han vinculado sus programas en BBVA a objetivos sostenibles relacionados con el compromiso de reducción de emisiones (objetivo Net Zero) ofreciendo incentivos a los proveedores participantes en los mismos.

Los programas basados en el uso de fondos para un proyecto en concreto, que contribuyen a impulsar alguno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (SDGs), pueden fomentar la sostenibilidad de las cadenas de suministro. Es el caso de la compañía de promoción y gestión de infraestructuras y energías renovables del grupo Acciona que en año 2020 lanzó su proyecto Ness Energy para construir y operar una planta de transformación de residuos en energía en Escocia. Para ello, formalizó con BBVA una línea de Supply Chain Finance internacional que está alineado con el ODS 3, salud y bienestar; ODS 11, ciudades y comunidades sostenibles; y el ODS 12, producción y consumo responsables.

¿Qué tendencias hay en el mercado en Supply Chain Finance que pueden ayudar a las empresas a optimizar la gestión de sus cadenas de suministro?

La transformación digital está cambiando la manera de relacionarse con el cliente, que demanda soluciones rápidas, seguras y con una experiencia de usuario atractiva. Según el estudio de Deloitte ‘Madurez de la banca digital’ del año 2020, los “campeones digitales” establecen tendencias clave y tienen prácticas líderes en el mercado. El 81% de dichos campeones pertenecen a la banca tradicional, entidades con una posición consolidada en el mercado.

La gestión optimizada de los programas de Supply Chain Finance tiene tres retos importantes:

  1. La vinculación de los proveedores como nuevos clientes con una oferta de servicios financieros adaptados a su propio riesgo.
  2. El dato como fuente de rentabilidad, explotando datos reales de clientes para analizar tendencias y facilitar el análisis de riesgo y precio.
  3. La cobertura completa del proceso de producción y venta, desde la financiación de la orden de compra hasta el pago por ‘confirming' a través de una plataforma digital rápida, segura y global en distintos países y monedas al mismo tiempo.